Resumen
El ano contiene numerosas terminaciones nerviosas que producen placer al ser estimuladas, es una zona erógena tanto en varones (de cualquier orientación sexual) como en mujeres. Y no sólo el ano, también la estimulación externa del periné (la región entre los testículos y el ano) es una zona erógena.
Pero además en los varones, este tipo de estimulación es especialmente placentera ya que en el interior del ano se llega a tocar la cara posterior de la próstata, que también contiene terminaciones nerviosas.
La estimulación anal, que no es otra cosa que una experiencia erótica en la cual se incluye al cuerpo en toda su dimensión (física y emocional). Esta variante puede despertar placer, resistencia o rechazo, siendo el ano una de las zonas erógenas que más carga simbólica tiene desde el punto cultural y social.
Existen, además, en el mercado algunos juguetes sexuales cuyo objetivo es la estimulación de la próstata.
Las técnicas más comunes incluyen tocar el orificio anal mientras se masturban o manipulan los genitales propios o de la pareja; o estimular el ano de su pareja durante el coito, o el método oral-genital. Es decir la masturbación anal suele ir acompañada de estimulación genital, con el propósito de aumentar la excitación e incluso provocar el orgasmo.
Los juguetes sexuales pueden ayudar a comenzar una nueva práctica sexual.
Los hombres aún se resisten a esta práctica por prejuicios sociales: “temor a ser homosexuales”.
La asociación entre el ano y la homosexualidad es un mito ya que el ano reacciona en forma erógena a cualquier estimulación y sin importar si la orientación sexual es hetero u homo.
Aún en nuestra sociedad se sigue relacionando el ano con la homosexualidad. Frases como “no sea que me acostumbre” “¿y si después resulta que me termina gustando?” son típicas de una cultura machista y sin educación sexual. Cuando en realidad muchos homosexuales no tienen relaciones anales. No es un órgano lo que define a la homosexualidad, ni a la heterosexualidad. Ser homosexual significa que una persona se siente atraída por personas del miso sexo. Cómo se vincularán sexualmente es otro tema. Hay homosexuales varones que no tienen relaciones anales.
Además no toda relación sexual homosexual termina en penetración, ya que su erotismo le da mucha importancia al juego previo y al orgasmo se llega por masturbación o alternando masturbación y penetración. Esta es una de las creencias que convierte la relación heterosexual en una norma que dirige el accionar de otras formas de orientación y de encuentro.
Las recomendaciones necesarias para la estimulación anal son:
1 El uso de lubricantes de base acuosa
2. Comenzar estimulando la zona del periné (entre los testículos y el ano) para luego pasar al ano propiamente dicho y a la penetración rectal. El sexo oral y el uso de lubricantes ayudan a relajarlo. La penetración puede ser con dedos o algún juguete sexual
3. Y este momento tan particular de la pandemia, es necesario tener en cuenta cómo ya ha sido documentado que el Sars-CoV 2 se trasmite por las heces (Fuente: Departamento de Salud de Nueva York 19/3/2020). Por tanto, cualquier práctica que involucre al ano, tanto sea el uso de juguetes sexuales, el dedo, o el rimming (boca en el ano) puede propagar COVID-19, y en tal sentido hay que tomar los recaudos necesarios.
Desde el punto de vista médico todos estos mitos que devienen de las falsas creencias “ano-homosexualidad” son importantes porque inhabilitan al varón a concurrir a los controles necesarios para la detección precoz de un cáncer de próstata. Es frecuente ver que muchos hombres se resisten al control por los temores que devienen de ellas y es necesario conocer que sólo por este procedimiento pueden evitar la muerte.
El tacto rectal es fundamental para detectar junto con el PSA (Antígeno Prostático) un cáncer de próstata. Y en este contexto: el consultorio, el paciente no va a sentir placer (es otro el otro objetivo, es diferente contexto y otros los tiempos). El ejemplo más claro puede ser el examen ginecológico, las mujeres no suelen excitarse porque se les realice un tacto genital. No hay entorno (es en consultorio médico), no es realizado con la intención de buscar placer, sino con un objetivo médico y el tiempo es el justo y necesario para el procedimiento.
Escuchar audio completo de Radio Sarandí a continuación:
Audio: Estimulación anal en el varón heterosexual